por Patricia Sepúlveda y Victoria Obregón1
“La rosa de los vientos ha tenido poca oportunidad para ser tan rosa y tan de los vientos como hoy”, exclamó Dora Barrancos, académica y feminista de larga trayectoria, y el lugar estalló en aplausos y entusiasmo ante el sentimiento de ser parte de algo histórico, colectivo y potente como el amor mismo.
Habían pasado algunos minutos de las seis de la tarde del 27 de abril, un día con clima un tanto pesado, y quienes nos encargábamos de que tuviera lugar el Conversatorio sobre la legalización del aborto, bajo el lema «Nuestras vidas, nuestros cuerpos», en la Universidad Nacional de Quilmes (UNQ) seguíamos corriendo tras los detalles. El sonido, ok. Las botellas de agua, ok. Las sillas, ok. El proyector, ok. Así, como en una lista interminable de repasos, entusiasmadísimas chequeábamos que todo estuviera donde debía estar para que el encuentro marchara “a todo ritmo”.
Ya se encontraba cada invitada en la mesa. La ilustradora feminista Romina Ferrer comenzaba los primeros trazos de su magia y aquelles que se acercaban a compartir se habían acomodado. Fue entonces cuando Dora Barrancos, directora de la Cátedra de Género y Sexualidades de la UNQ, exclamó: “La rosa de los vientos ha tenido poca oportunidad para ser tan rosa y tan de los vientos como hoy”. Fue como si, visualizando el deseo colectivo que nos movía, lanzara su soplido sobre el enorme diente de león que configurábamos todes allí para que la constelación de semillas en la que nos convertimos —la que somos— empezara a diseminarse y desparramarse hacia todos los puntos de esa Rosa tiñendo de verde aborto legal toda la Universidad.
Venimos cual rizomas, desde abajo, enredando y potenciando nuestra fuerza y organización, apostándolo todo a concretar los deseos colectivos. Motorizadas por lo que nos ha sido negado históricamente y por esa nueva marea que supimos construir.
Lo que viene pasando en la UNQ
En la Universidad Nacional de Quilmes distintos agrupamientos y espacios trabajan y promueven conocimiento y acciones acerca de las mujeres y las sexualidades disidentes desde la perspectiva de género, entre los cuales se encuentra la Cátedra Abierta de Género y Sexualidades. Si hacemos un recorrido a través de las iniciativas institucionales que se han ido llevando adelante, solo en los últimos años, podemos mencionar, además de la Cátedra, la creación del “Programa de acción institucional para la prevención de la violencia de género”, el “Protocolo de acción institucional para la prevención e intervención ante situaciones de violencia o discriminación de género”, proyectos de extensión universitaria, el Diploma de extensión universitaria de prevención y abordaje de la violencia contra las mujeres; además del apoyo, desde hace más de 10 años, a la participación de las mujeres de la comunidad universitaria en los encuentros nacionales de mujeres.
Es así que cada espacio, de diferentes maneras, aglutinó esfuerzos y voluntades en nuestra comunidad posibilitando la articulación y la organización de actividades en esta especial coyuntura.
Porque hemos llegado a este presente con la fuerza de la movilización social que los feminismos y los colectivos sociosexuales han llevado adelante en torno a la demanda por el aborto legal, seguro y gratuito en nuestro país. También llegamos hasta aquí por un proceso sociopolítico e histórico que supo favorecer el crecimiento de temas relacionados con las mujeres, disidencias y sexualidades, en clave de derechos.
Así, sin ánimo de hacer una exhaustiva genealogía de conquistas, destacamos la sanción de las leyes: 26.150 de Educación Sexual Integral (2006), 26.485 de Protección integral para prevenir, sancionar y erradicar la violencia contra las mujeres en los ámbitos en que desarrollen sus relaciones interpersonales (2009), 26.618 de Matrimonio Igualitario (2010) y 26.743 de Identidad de Género (2012), entre otras.
Este proceso ha sido acompañado por la movilización en las calles y la presencia de agrupamientos y organizaciones demandando al Estado el cumplimiento de esa legislación y su crecimiento. Pensamos que el surgimiento del colectivo “Ni una menos” el 3 de junio de 2015, en contra de la violencia machista, fue un hito fundamental.
En consonancia con lo que venía ocurriendo en la sociedad, en 2018 en la UNQ tuvieron lugar asambleas para acordar acciones con vistas al paro internacional de mujeres #8M: pintadas de banderas y consignas, participación colectiva en movilizaciones, conformación del espacio Mujer@s UNQ, articulaciones con integrantes de agrupaciones estudiantiles, docentes y personal administrativo y de servicios, etcétera.
Una cronología de las actividades de nuestro colectivo
Llegó el 19 de abril, día en que las universitarias e investigadoras de la UNQ nos reunimos para firmar la carta dirigida a lxs diputadxs solicitándoles la aprobación del proyecto de Ley IVE (Interrupción Voluntaria del Embarazo). Actividad que, impulsada por “Mujeres en CyT”, fue antesala del conversatorio del día 27.
Este 1er conversatorio “Nuestras vidas nuestros cuerpos. Debatiendo la legalización del aborto”, construido y promovido colectivamente, sumó la adhesión del Consejo Superior de la UNQ que emitió declaraciones de adhesión al proyecto de Ley IVE, presentado en la Cámara Baja, y a esta actividad, evidenciando la sinergia que se ha desarrollado.
El conversatorio promovió un gran intercambio a partir de las exposiciones enriquecedoras de las invitadas: Ayelén García Chaves, Agustina Vidales Agüero, Marta Alanis y Romina Ferrer, quienes nos cautivaron y alimentaron la idea y la convicción de que este es el momento para avanzar en la concreción del derecho al aborto, históricamente negado.
Así, las experiencias de acompañamiento en la interrupción de embarazos a mujeres y personas con posibilidad de gestar, compartidas por Ayelén García Chaves; el análisis profundo del proyecto de ley propuesto por la Campaña Nacional por el Aborto Seguro, Legal y Gratuito que brindó Agustina Vidales Agüero; y la historización de la lucha por la obtención de este derecho desde el espacio de Mujeres Católicas por el Derecho a Decidir de la mano de Marta Alanis, inspiraron nuestras reflexiones. Y las ilustraciones en vivo de Romina Ferrer condensaron de forma magistral cada exposición. La energía, el ambiente, la fuerza poderosa que allí respirábamos, hicieron que ese día no fuera un día más en la Universidad.
“Ahora que estamos juntas, ahora que sí nos ven, el aborto clandestino se va caer, se va caer. Aprueben este proyecto, que sea ley, que sea ley”. Ese fue el grito vivo con el que sellamos un nuevo pacto. Fueron las palabras con las que fortalecimos la organización, la lucha. ¡Porque es y será al encontrarnos, abrazarnos, escucharnos, entendernos pares, hermanas, con la sororidad como bandera y movidas por el profundo y ancestral deseo de transformarlo todo, que venceremos!
Y continuamos…
Con la euforia de la media sanción conquistada, seguimos amasando actividades. Nos reunimos el 18 de junio para abrazarnos por la media sanción y el 27 en una nueva asamblea convocamos a realizar fotos con frases y pañuelos y los hashtags #ahoraescuando, #abortolegalsindemoras y #seráley.
En julio el envión nos reunió en el segundo conversatorio “Nuestras vidas nuestros cuerpos, debatiendo la legalización del aborto con vistas al tratamiento en el Senado” con Dolores Fenoy, coordinadora del Sistema Único de Atención del Ministerio de Salud de la Nación e integrante de la Campaña, quien nos ayudó a comprender las complejas negociaciones y cabildeos con los senadores y senadoras para que el proyecto de ley avance en la Cámara. Celeste Perosino, antropóloga forense y católica por el derecho a decidir, quien puso cuerpo y pasión a la exposición dejándonos frases como “El Estado ha sido garante de la muerte de mujeres por aborto clandestino” y “La muerte por aborto clandestino es femicidio de Estado”. Vicu Villanueva, humorista feminista, nos conmovió con su canción “súper guerreras”.
La siguiente actividad, más académica pero igual de comprometida, fue la presentación del libro Aborto. Aspectos normativos, jurídicos y discursivos, coordinado por Daniel Busdygan.
Y así llegamos a este agosto que nos encuentra sororamente unides de cara a la sanción de la ley y con la certeza de que cualquiera sea el resultado, nada, pero nada será igual que antes, porque hermanas ¡estamos haciendo historia!
DESPENALIZAR Y LEGALIZAR EL ABORTO ES UNA DEUDA DE LA DEMOCRACIA. ES EL RECONOCIMIENTO HASTA HOY NEGADO DE LA AUTONOMÍA SOBRE NUESTROS DESEOS, VIDAS, CUERPOS. ES UNA CUESTIÓN DE SALUD PÚBLICA, DE DERECHOS HUMANOS Y DE JUSTICIA SOCIAL.
Convencidas de que #estamoshaciendohistoria, de que el #tiempoesahora. Convencidas de que el Aborto Legal Seguro y Gratuito #SeráLey
¡HACIA AHÍ VAMOS, HERMANADAS, MÁS JUNTAS QUE NUNCA!
Post scríptum
Estos párrafos han sido escritos con posterioridad al debate realizado en el Senado y la no sanción de la ley.
Hacia el final de la nota afirmábamos “cualquiera sea el resultado, nada, pero nada será igual que antes, porque hermanas ¡estamos haciendo historia!”
Y fue así, hicimos historia, con la presencia en las calles, con el debate público abierto al respecto, con su despenalización social. ¡El aborto salió del clóset, ya no es un tema del que se habla en voz baja!
Y en esta misma línea, destacamos el conocimiento social, el debate abierto en todos los medios, la difusión que alcanzó la Campaña Nacional por el Aborto Legal, Seguro y Gratuito y las articulaciones logradas con otras organizaciones afines y los grupos de aquelles que nos identificamos como feministas. La marea verde se hizo sentir y eso no tiene retorno. La presencia de distintas generaciones en las calles, con predominio de las más jóvenes, muestra un futuro esperanzador.
Por esto y tanto más, decimos: ¡no hay vuelta atrás! Este será un hito en una lucha por la conquista de nuestra autonomía y la decisión de las personas con capacidad de gestar, sobre nuestros cuerpos. El debate ha revitalizado aún entre lxs más recalcitrantes representantes, derechos que debemos consolidar como la implementación de protocolos para la realización de abortos no punibles en todas las provincias y el cumplimiento efectivo en todo el país de la Ley de Educación Sexual Integral.
Destacamos también el alto nivel de difusión y de exposición pública que tuvo la discusión. Nadie puede decir que no sabe lo que piensan lxs senadorxs de sus provincias, y eso pesará en las próximas elecciones. Porque no fue el congreso quien rechazó la ley. La rechazaron lxs senadorxs intentando volver al clóset un tema que desterramos de la clandestinidad, esa en la que hoy siguen muriendo mujeres. Muertes de las que son responsables.
Por eso, y con la tristeza de llorar la vida de compañeras a flor de piel, seguimos exigiendo que dejen de condenarnos a muerte por el hecho y derecho que nos corresponde: decidir sobre nuestros cuerpos y proyectos de vida. ¡Más temprano que tarde será ley!
Nota
[1
] Cátedra Abierta de Género y Sexualidades https://www.facebook.com/catedraunq/
Ilustración de esta página: Fotografía realizada durante el Conversatorio sobre la legalización del aborto.